El rubio de mi vida sigue malito, vuelve a "gomitar" y como no podía ser de otra manera, esta mañana nos hemos ido al hospital. Esta vez hemos ido preparados de coches, cuentos y pegatinas. Por suerte la estancia se ha reducido a 4 horas y nos hemos vuelto a casa, con tiempo suficiente para ir a nuestro pediatra ...
Mañana tendremos que hacernos una ecografía, lo cierto es que no paramos de perder peso, cada vez estamos más largos y más flacos.
Príncipe, tienes que comer más y ponerte bueno de una vez para poder ir a pescar tiburones con papi, te quiero mi sol.
2 comentarios:
¡qué mal se pasa! jolin que penita..A ver si se recupera prontito y esta pesadilla pasa esta pesadilla de una vez. Muchos besos para el principe malito.
Mil besos para él y su mami y a ver si pronto nos cuentas que está bueno otra vez.
Publicar un comentario