Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

domingo, 25 de mayo de 2008

¿Cuando me toca a mí?

Hoy debería haber sido un día de celebración, al fin y al cabo dieciseis años de relación no se cumplen todos los días, y ese es el tiempo que llevamos mi contrario y yo caminando de la mano.
Pero a lo que vamos, hoy me levanté atravesada, sí, lo reconozco, me levanté con el pantalón de cuadros y no me lo he quitado en todo el día. Pero es que mi contraparte a veces me saca de quicio. Yo he amanecido a las 8, con Pepón diciendo que no quería dormir más y Juan reclamando su desayuno. Ahí han empezado las carreras, desayunos, camas, vestir niños, y mientras él, en la cama. ¡Qué facilidad tiene para no oir, para no moverse!, por más que los niños le salten por encima... Así hemos llegado a las 10 de la mañana en que felizmente ha anunciado que se tenía que pasar por el trabajo.
Es que ni el gran Houdini (¿se escribe así?) tiene la facilidad que él para desaparecer.
La tarde ha sido de carreras, hemos tenido dos cumpleaños infantiles así que nos hemos pasado la tarde en el coche y hemos llegado a casa tardísimo.
Por hacerlo breve, puede sonar friki total pero lo único que yo quería hoy era ver al Chiquilicuatre en Eurovisión y justo cuando ha salido Pepón llamaba porque "se le ha caido el agua en el pantalón del pijama". Ni que decir tiene que la que ha tenido que ir a arreglar el desaguisado he sido yo, mi contrario andaba ocupado con el ordenador.
En fin, que él ya hace rato que se ha ido a dormir, porque claro, el pobre estaba muy cansado, la verdad es que sí, que debe estarlo, sobre todo de aguantar mi cara larga todo el día, pero ¿qué pasa conmigo?, y yo qué?, ¿cuando me toca a mí?. ¿A alguien le importa lo que yo quiero, lo que a mí me gustaría o si estoy cansada?.

Por cierto, Eurovisión lo ha ganado Rusia (cantando en inglés).

viernes, 23 de mayo de 2008

Daniela


Daniela es guapa, de veras lo es, aunque ella diga que no. No está acostumbrada a que le digan cosas bonitas y debería estarlo.
Es delgada, muy delgada y de estatura media, con largo pelo lacio castaño y reflejos rojizos. Tiene los ojos expresivos, la nariz recta, ni grande ni chica, la adecuada y las manos grandes de trabajar mucho.
Dani llegó a nuestras vidas hace ahora cuatro años. Cuatro años de ayuda y colaboración mutua, que se han ido "cocinando" hasta convertirse en cariño y amistad sincera.
Dani son mis otras manos, mis otros ojos que vigilan, los pies que corren detrás de los niños. ¡Ay esos niños!, los ha visto nacer y crecer y los malcria y achucha casi tanto como yo.
Dani se casa, este verano, me gustaría regalarle su vestido de novia, pero no me deja, tiene su orgullo y eso es bueno. Su comienzo de matrimonio me temo que no va a ser fácil, su novio tendrá que venirse a vivir a Madrid y perderá su trabajo estable en una de las esquinas de nuestro país, pero ella está acostumbrada al riesgo.
Llegó a España hace siete años, me gustaría decir que con una mano delante y otra detrás, pero en realidad vino con las dos detrás y lo pasó mal y eso casi nunca lo cuenta, no es mujer de quejas.
Tampoco se quejó cuando en el primer sitio donde trabajó los niños la humillaban, no toda la culpa era suya, sus padres nunca les reprendían. Pero aquello ya pasó, por suerte para nosotros salió a nuestro encuentro.
En fin, que no sé como clasificarla, cómo definir sus quehaceres diarios, creo que habría que inventar una nueva categoría, la de las Danielas.

Ese estado...


Como bien decía Ortega y Gasset (que es uno sólo y no dos) el amor es un estado de imbecilidad transitorio. Y el amor y el enamoramiento (que son dos cosas bien distintas y no una) se confunden en no pocas ocasiones.

Como he dicho en otras ocasiones amo a mi marido, pero del enamoramiento inicial (del que mañana cumplimos 16 años) queda poco. Yo le amo, con sus virtudes y sus defectos, tal y como es y ya no tengo ese enamoramiento que me hacía obviar sus faltas, no, ahora las veo y aprendo a quererlas también, o por lo menos a asumirlas.

Pero también estoy enamorada, de mis hijos, a ellos aún no les he encontrado defectos, y me temo que no sea porque no los tienen, sino porque llevo las gafas de color de rosa a la hora de mirarles.

Un tipo listo ese Ortega y Gasset.

Pepón y el beso


El amor de mi vida está un poco mustio. Lleva ya un tiempo rarete, dice que está cansado y que le duele la pita (la barrigota), ahora tiene febrícula.
Ayer fuimos de nuevo al médico y ahora parece que podemos haber encontrado la causa, una mononucleosis, la enfermedad del beso, tendremos que confirmarlo el lunes con un análisis de sangre.
Él está bien, tan contento como siempre y es tan borricote como de costumbre, pero de repente se para y dice que está cansado.
Hoy está en casa, "contigo, contigo", como dice él, pero esta mañana quería ir al cole. Claro, están preparando ya la fiesta de fin de curso, están ensayando el baile y a él le toca con Natalia. Además el viernes que viene será la fiesta de la primavera y esa sí que no se la puede perder. No sé cómo lo haremos, si le llevaré y me quedaré como mamá de apoyo para tenerle vigilado o si le dejaré sólo hasta la hora de comer, pero no quiero que falte, es una fiesta preciosa.
Y a mí se me saltan las lágrimas, estoy tonta y sensiblona, la Colorá sigue avisando pero no llega y eso me hace estar especialmente ñoña. Pienso qué será lo que tiene mi amor y vienen a mi cabeza las posibilidades más horribles. Sé que no debería ser así, pero me viene de familia...
En fin, que hoy llueve en mi corazón tanto como en mi jardín.

domingo, 18 de mayo de 2008

Doña Colorá

Doña Colorá me ronda. Se acabó tener la piel limpia, sin acné, se acabó tener el pelo maravilloso sin rastro de grasa, se acabó lo de depilarme cada 4 semanas. La colorá está a punto de regresar a mi vida, noto ya ese dolor-molestia en la tripa, en los riñones, son los telegramas de la Colorá avisando de su llegada, y noto también esas energías que me entran por no parar de hacer cosas...
Doña Colorá llegó a mi vida con 12 años y me cayó mal así de entrada, además siempre ha sido imprevisible, viene cuando le da la gana, a ser posible cuando más incordia, durante años la eché de más y ahora casi casi, la echo de menos.
Y es que hay que ver lo que aprendemos las mujeres gracias a ella, en el cole, a esconder la compresa para que los chicos no sospechen y de mayores a arreglarnosla para que no nos estropee planes previstos.
La verdad es que ya está bien, desde el 19 de Enero de 2007 no viene a visitarme y tengo curiosidad por saber si ha cambiado en todo este tiempo, pero es que no verla ha sido estupendo, sobre todo porque tenía un duende en mi barriga y eso es lo más, pero bueno, es parte de mí y aquí la espero, al fin y al cabo sin ella no hubiera sabido nunca eso de "¿a qué huelen las nubes?".

viernes, 16 de mayo de 2008

Me regalo 5 minutos


Antes de volver a correr. Y estos cinco minutos tengo que estirarlos como si fueran de chicle. Hoy está siendo un día raro, entre medias de dos días sin cole, con la fiesta de San Isidro en el cole de Pepón (qué bonito iba con su gorrilla), he ido a comprar su disfraz para la fiesta de fin de curso, pero antes he envuelto tres docenas de croquetas (la masa la hice anoche antes de acostarme), he comprado los menesteres precisos para preparar los purés de Juan sin miedo y ... bueno, que no he parado.
Ahora acabo de bañar a Juan y tengo que empezar con las otras fieras, tengo en la cocina las ollas esperando para pasar por la batidora, con el pollo y la ternera del peque.
Echo de menos maquillarme, arrreglarme un poco, como cuando voy a trabajar, echo de menos parecer una "pofesioná".
Pero no puedo dejar de sentirme culpable por pensar estas tonterías si me acuerdo de Futu. Hoy me ha llamado Mbego, sus mellizas ya tienen nombre y ella se siente completa (en todos los sentidos). En fin, que en mi cabeza hay sitio de sobra para todo. Sigo pendiente de Myr que debe estar llorando su luto por lo que pudo ser y no fue y aún tenemos pendiente concretar un desayuno con Paloma y con las que os querais apuntar (¿hay alguien ahí?).
Que me voy, que ando como siempre, liada, para que luego alguien me diga eso de "claro, como ahora no trabajas...".

jueves, 15 de mayo de 2008

Fiesta de No-Cumpleaños


Con mi abuelo en el hospital, las vacaciones de por medio y el puente de mayo no habíamos celebrado ni el día del padre, ni de la madre, ni el cumple de mi contrario ni el de Pepón, así que para arreglar el "desaguisado" hemos tenido hoy una comida familiar de no-cumpleaños.
Éramos pocos, porque los tios se han ido de puente, así que al final estabamos los de casa y los abuelos.
Inés ha elegido su vestido rosa, para estar guapísima todo el día y a Pepón le he puesto una camisa a juego (no puedo evitarlo, me encanta verlos iguales) y la comida ha salido estupenda, han jugado a los indios, han leido cuentos. Lo hemos pasado fenomenal.
Me gusta mi familia.

martes, 13 de mayo de 2008

El 13 de Mayo en Cova de Iría...

... bajó de los cielos la virgen María...

Y eso fue, que al médico se le apareció la Virgen y le puso nombre a mis años de buscar niños sin encontrar, ¡tengo SOP!. De eso hace hoy exactamente 6 años.
Este es mi mensaje coñazo anual, sólo que este año indulto a las de los tableros y lo cuelgo aquí.
La de cosas que han pasado en estos 6 añazos, hagamos medias..., 6 años, 3 niños, el mismo maridoooooo, bueno, no va mal la cosa.
Besos

miércoles, 7 de mayo de 2008

Querida Myr:


Querida Myriam:
Qué dificil se hace a veces hablar de lo que duele, y los hijos duelen, los que se tienen, los que se desean, los que se pierden...
He leido tu mensaje en los tableros y me hubiera gustado poder abrazarte, achucharte un poquito mientras lo escribías.
Eres una valiente, hagas lo que hagas ya lo has demostrado, pero ¿realmente abandonas tu sueño?, si es así estaré contigo si me necesitas, y si cambias de idea, también.
Eres muy afortunada, tienes unos hijos preciosos, una vida llena de cosas maravillosas, pero aún quedan muchos sueños en tu cabeza.
Cada uno de tus "negativos" ha sido un paso adelante, pero quién sabe, quizás es el momento de pararse a mirar, a disfrutar de los resultados de tanta lucha.
Pareceré una anciana decrépita si te digo eso tan gastado de "aún eres muy joven, tienes toda la vida por delante", pero es que es así. Aunque te tomes un tiempo de descanso aún puedes seguir luchando.¿Merece la pena un esfuerzo más?, quizás sí, quizás no. Segurante es más valiente parar, no lo se, yo siempre he sido una cobarde.
Bueno, ya lo sabes, no se si me he explicado, quizás no, no sé. Lo que he querido decir es que hagas lo que hagas será lo correcto y que haces bien en sentirte afortunada con tus dos soles, porque lo eres.
Besos

Lou

martes, 6 de mayo de 2008

¿Para qué sirvo?

Madre mía que puente, uf.
Empezamos mal, con un atasco de salida que te puedes morir, menos mal que los niños son unos benditos y se durmieron, porque llegamos a Benidorm a las 2 de la mañana.
Pero eso fue sólo el principio. Suena bonito, idílico, cuatro días para nosotros solitos, la familia Trap y ni uno más, no más abuelos, no más tios, no más intromisiones... Pero todo tiene un pero. Los niños son muy pequeños, hay que mantener más o menos sus horarios y rutinas y aunque mi contrario ayuda y mucho, la que lleva el peso de la casa soy yo, y por eso soy una pesada. Me parece que he ido arrastrándome durante los 4 días, sin pararme a disfrutar sino algunos pequeños momentos, justo antes de empezar a correr de nuevo.
Él me dice que soy una agonías, que no puedo ser tan estricta, pero es que no sé ser de otra manera, y doy fe de que de veras lo intento, pero no me sale.
Además, como siempre que salimos, los niños se ponen malos y hay que ir al médico, esta vez han sido anginas, bueno, cosas de niños.
El caso es que no puedo dejar de preguntarme para qué sirvo. Estos días me he sentido fracasada como madre, había veces que echaba de menos no ser un pulpo para tener más manos y también fracasada como amante-compañera, porque terminaba el día tan agotada que para pocas fiestas estaba.
Menos mal que hoy hemos vuelto a la rutina, me siento afortunada de haber podido disfrutar de mi familia, pero tengo mucho que aprender y que cambiar en mi forma de ser o volveré a tener úlcera de estómago.

Higos chumbos


Ay abuelo, cúanto me acuerdo de tí, a cada paso, en cada momento, pero estos días un poquito más.
Nos hemos ido a la playa, a Benidorm, lo que tú disfrutaste allí, del sol y del mar, de los largos paseos por los olivares cuando detras de la playa de Poniente todo era montaña. Ya sabes que hace bastantes años que eso cambió, pero no podrías ni llegar a imaginarte lo infame que está ahora, todo son obras y rascacielos. De aquellos olivares por donde paseabamos apenas queda nada.
Era la tradición, el sábado antes de domingo de ramos nos ibamos a por ramitas de olivo, contigo, de la mano y ¿te acuerdas aquel día que fuimos a por higos chumbos?, tu te acercabas a la chumbera y los pinchitos se te quedaban clavados en el pantalón sin que apenas lo notases y luego, cuando llegaste a casa y te sentaste en el sofá allí quedaron todos. Era una risa ver como donde pusieramos el culete, había un pincho. Y te reías entre dientes cada vez que la abuela, o mamá o la tita nos regañaban.Ahora las chumberas adornan algunas urbanizaciones, y ya sabes lo que le gustan a Inés los cactus (¿de donde habrá sacado esa afición?) y le hacían gracia esas "bolitas" que algunos tenía, los higos chumbos. Algún día le contaré lo que nos reimos aquella tarde. Por momentos me hago vieja, vienen a mi cabeza tantos recurdos...
Te quiero abuelo.