Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

lunes, 30 de noviembre de 2009

Resumiendo el fin de semana

No ha estado mal del todo y eso que lo empezamos en el hospi.
El sábado empezó a subirle la fiebre a mi rubio amor, y llegó a 38, que es el límite de alarma para llevarle al hospi.
Como tenemos "enchufe" no hizo falta esperar en urgencias, sobre todo porque con la cantidad de virus que hay, él no puede mezclarse con otros niños. Como hacía falta una analítica le subieron a planta, para que le pinchase el porta una de las enfermeras de siempre.
El resultado de la analítica perfecto, oncológicamente hablando, lo que tiene es una otitis que ha requerido de antibiótico. Esta mañana he hablado con la oncóloga y parece que si su analítica de mañana está bien, el antibiótico no interferirá la intratecal de mañana.
El caso es que no hemos salido de casa, el sábado vinieron las primas a jugar por la tarde y ayer los tíos a ver el fútbol.
Mamá salió deprisa por la mañana. Me acerqué al centro comercial a comprar un regalo de cumpleaños para Casi (Casandra) y de paso compré dos pollos asados, uno de ellos está ya felizmente convertido en croquetas de pollo y jamón.
Por la tarde papá acercó a mi sol al cumple y yo fui a recogerle, qué contento se le veía.
Hoy han ido todos al cole, espero que eso no fastidie la analítica de mañana, pero es que tengo que evitar que dé vueltas a su cabeza, anoche se durmió llorando otra vez porque no quiere que le pinchen más.

sábado, 28 de noviembre de 2009

Cumpleaños

Ayer invitaron a mi sol a un cumpleaños, será mañana domingo. Está como loco. En realidad como el año pasado perdió el curso casi completo, le invitan muy poco, esta es la tercera vez. Al primero no pudo ir porque estabamos ingresados, el segundo lo disfrutó como loco y ahora tiene una ilusión tremenda.
El caso es que sigue bastante costipado, y sigue con febrícula. No creo que salgamos hoy de casa, a ver si mejora un poco, pero yo creo que aunque siga igual, le llevaré, no puedo quitarle la ilusión.

viernes, 27 de noviembre de 2009

Mis zapatos nuevos

Mi sol ha ido al cole. Se levantó bien, contento y sin fiebre, y allá que se fue. Estuve colgada del móvil todo el día esperando que me llamasen del cole diciendo que tenía fiebre, pero por suerte no ocurrió.
He aprovechado a salir, a que me diera el aire, a tomar café con mis compañeras de traabajo y a dar una vuelta por las tiendas de la zona.
Al final, me tentaron unos zapatos, y es que las costumbres cuesta soltarlas, son de Bimba & Lola. Está el mismo modelo en dos alturas de tacón, yo me compré el más bajito y es que con tres duendes tengo que poder correr con ellos.
A mí me parecen preciosos.

Estoy deseando estrenarlos.

Abrumada...

Pues sí, así me siento, Duna me ha concedido otro premio y será el último, porque con tanto halago se me va a subir la tontería a la cabeza y os aseguro que en mi cabeza no queda sitio para nada.
Pero ahí va, cumplo con los requisitos:



1. Dar las gracias a quien me lo otorgó: Gracias Duna de "Dosis de recuerdos".
2. Decir un autor que me encanta: bueno, en general me resulta fácil leer lo que escribe Isabel Allende, pero me quedo con Antoine de Saint-Exupéry y a partir de Enero con Lamar de "La mar de Estrellas".
3. Nombrar un autor que detestes: hombre, detestar, detestar, ninguno, me cae gordo Cela, pero es más por el personaje en sí que por su obra.
4. El libro que más me gusta: El Principito, sin duda alguna.
5. Qué me emociona siempre: abrazar a los que quiero, besarlos, estrujarlos, ver fotos antiguas y recordar con alegría a los que ya no están, escuchar sus voces en mi recuerdo, recordar su olor.
6. Algo que odio: la impotencia, no poder hacer más, la incertidumbre.
7. Pasar el premio a siete blogs: bueno, no sé si serán siete, pero ahí van:

* www.lamaedestrellas.blogspot.com, Lamar y su blog "La mar de estrellas"
* M, y su próximo blog, que espero que inicie cuanto antes.
* Silvia, de "Mi lucha".
* Carlos de "Diario de un cáncer"
* Esevalorquenoseve, del blog "Un mensaje al aire" www.esevalorquenoseve.blogspot.com, porque tiene mucho que contar y compartir.

y ya no pongo más porque no se lo voy a devolver a Duna, ni se lo voy a dar a MAeva, que ya lo tiene, y porque hay tantos blogs, que necesitaría días para nombrarlos a todos.
Gracias.

jueves, 26 de noviembre de 2009

Día de lluvia y en casa


Mis planes para hoy, que eran los que ayer no pude cumplir, han vuelto a irse a la porra.
Mi sol está en casa. Esta mañana, al vestirle y por comparación con sus hermanos me parecía que estaba caliente. En realidad tenía 37,1ºC, según el tercer termómetro que le puse, uno de esos clásicos de mercurio. He preferido dejarle en casa, a ver como evoluciona. Él está encantado, porque aquí juega con sus coches, hace lo que quiere y es el centro de atención, pero yo sé que no es bueno para él, sólo conseguirá aislarse un poco más de sus compañeros.
Quizás, si no le sube la fiebre, le lleve después de comer, aún no le he decidido.
El día está frio, nublado, cae una lluvia fina y persistente, en realidad lo único que apetece es meterse en la cama y no salir. Me sentaré cerca de la ventana y miraré como cae.

martes, 24 de noviembre de 2009

Respuestas difíciles

Mi sol no deja de darle vueltas a su cabecita.
Ya el domingo, a la hora de comer preguntó cuántos días faltaban para volver al hospi. Le contestamos que 10, pero no se quedó muy conforme.
Yo le veo bien, muy mimoso, pero bien en general, aunque tiene mucho miedo. Él no sabe como expresarlo ni manifestarlo, así que me llama por las noches para que duerma a su lado.
Tampoco quiere ir al colegio, dice que es mucho rato y que se cansa, no sé.
Anoche, a la hora de dormir empezó a llorar. Creo que se imaginaba que hoy, aunque no le hubiéramos dicho nada, le tocaba hospi. Nosotros no le engañamos, nunca, le decimos lo que hay de la mejor manera posible, pero el pobre no tenía consuelo.
Empezó a decir que no quería que le hicieran más soles en el brazo. En cada intratecal toca pinchar Asparraginasa y siempre, siempre, se hace una prueba intradérmica de alergia en el brazo. Las enfermeras le pintan un sol y le pinchan en lo que sería la nariz. Él ya está harto de soles.
Siguió llorando un buen rato, por más que me acosté con él y me hace preguntas para las que mis respuestas no le valen, la peor, la más dura y la más difícil de responder para mí es: ¿y por qué a mí me tienen que pinchar tantas veces y tengo que ir tanto al hospi y los otros niños no?.
Si alguien sabe la respuesta que me lo diga.

lunes, 23 de noviembre de 2009

El que la sigue...


... la consigue.
Sólo me ha costado cuatro visitas al IKEA, pero ya lo tengo, la funda nórdica Vitaminer Hjärta de corazones para mi hada.
Ni que decir tiene que viene acompañada en el pack por doscientas mierdikeas variadas: moldes para hacer madalenas, cajas para guardar porquerías, otro edredón nórdico por si viene alguna fiera amiga de mis niños a dormir, lo de siempre, cosas imprescindibles.
Además, hoy fuí con mi padres, que me hacen mucha compañía, me quieren mucho, tal y tal, pero me desesperan, ¡qué pesados!, todo lo miran. Y yo les digo, a ver, ¿se puede saber qué demonios haceis mirando una cuna y los edredones para cuna?, pues nada, ellos allí, entusiasmados con cualquier cosita.
En fin, tampoco llevabamos prisa, la verdad.
Me encanta ir a IKEA, compraré o no, encontraré lo que busco o no, pero me divierte cantidad.

Duna, te dedico mi entrada de hoy. Besos

Relaciones inversas

Mi vida está llena de relaciones inversas.
Mi autoestima es inversamente proporcional a mis kilos, así que ahora con 6 kilos de más tengo 6 "autoestimamientos" menos.
Mis energías para hacer dieta son inversamente proporcionales a mi nivel de preocupación, y con todos los malos ratos que he pasado últimamente, la palabra "dieta" se ha borrado de mi disco duro.
Pero es que el sábado ya no lo pude evitar, tuve que mirarme al espejo toda entera, nada de por trocitos, no.
Lo que con 6 kilos menos es un leve acolchado en mis piernas de ha convertido en un mullido edredón nórdico de plumas.
Mis cartucheras podrían acoger, no un revolver pequeño, no, una escopeta de cañones recortados por lo menos.
Y lo peor de todo ahí está él, EL MICHELÍN. Yo no sé si vosotras teneis algo parecido. Está en el lateral, desde debajo de las costillas hasta lo que debería ser la cintura. Así a simple vista no se aprecia demasiado bien, ¡pero se mueve!, tiene vida propia, tu vas andando y él se bambolea...
En fin, que tengo que tomar cartas en el asunto. Mucha fuerza de voluntad no tengo, en realidad tengo más hambre que fuerzas, pero tengo que conseguirlo. Me conformo con que EL MICHELÍN deje de tener vida propia.
Si es que estando así no me apetece vestirme, como mucho taparme. No me valen los pantalones que compré el año pasado, las camisas me quedan apretadas, bueno, eso no me importa tanto, así por lo menos entre el relleno del sujetador y el botón de la camisa a punto de reventar parece que tengo delantera...
Pero, ¿qué hacer con el culo?. Porque vale, yo siempre he sido de retaguardia generosa, pero es que ya a mis años, el culo empieza a acercarse peligrosamente a las rodillas.
Y no me vengais ahora con que me apunte al gimnasio, ahí se suda y huele a "compañerismo", vamos, que no se inventó para mí.
En fin, que desde hoy empiezo de nuevo a pasar hambre, a ver qué consigo.

domingo, 22 de noviembre de 2009

Una segunda oportunidad

Como ya os conté allá por el mes de abril, en mis años mozos me enamoré perdidamente de un grupo pop de nuevos románticos: Spandau Ballet.
Cuando supe que harían nueva gira me faltó tiempo para ir a comprar las entradas para el concierto de Madrid del día 12 de Noviembre. Además me gasté una pasta, porque una ya no está para dar saltos y las cogí numeraditas, de asiento y en palco, vamos, un despilfarro.
Pasé meses soñando con ese día, imaginando cómo arrastrarían sus años de más y sus kilitos por el escenario. Pero llegó el día y estábamos pasando unos días difíciles. Después de la gastroenteritis que nos obligó a ingresar a Garbancito y los días tan malos que pasó mi sol yo no tenía el cuerpo para nada.
Busqué a través de facebook a la compañera del cole que me acompañaba en mis primeros días de fan, no la encontré, probé con la antigua dirección de sus padres, no hubo manera. Me resigné a perder las entradas con gran dolor de mi corazón.
Los días siguientes al concierto no tuve fuerza ni para leer críticas, fue sólo una semana después cuando me enteré de que han aplazado la gira y que el concierto previsto se celebrará el 15 de marzo próximo.
Espero aprovechar esta segunda oportunidad.

sábado, 21 de noviembre de 2009

¡Serán pedorros!

Son unos marujos y encima ejercen. Mis duendes mayores me han enfadado hoy.
Nos hemos levantado pronto, mami tenía que hacer unas ricas lentejas sin chorizo, sin jamón y sin nada verde para comer hoy.
Mientras ellos desayunaban y para que a mí me dé tiempo a hacer algo en casa, a mi contrario se le ha ocurrido la idea de decires que por qué no se iban a ver coches a no sé dónde. Vale, pues se van.
Empezamos a vestirnos. Saco yo un vestido azul precioso para mi hada, a juego con un jersey para mi sol. Primera pelea, que si ese vestido no me gusta, que si yo quiero el otro de flores para ponerme las botas altas..., vale, vale, vale, el de flores y las botas.
Sube mi sol, saco un jersey marrón, que pega más con el vestido de su hermana, uf, pues a mí el marrón no me gusta y yo no quiero esa camisa de rayas, jolines mamá, es que no me gusta nada la ropa que me compras.
Mirad niños, IROS A LA PORRA LOS DOS.
¡Yo quiero ser soltera!

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Tras la verja


Parecía que la mañana empezaba bien.
Mi sol se levantó sin rechistar de la cama para ir al cole y desayunó, lo cual me sorprendió agradablemente, al fin y al cabo, anoche le tocaban las 6 pastillas de metotrexate y la de mercaptopurina, que le sientan fatal.
Por lo general los miércoles no suelo hacer planes, en realidad no sé si mi sol se quedará en casa, si se encontrará bien o no. Hoy ha ido al cole con normalidad. Pero a eso de las 10:15 me ha llamado su señorita, me comentó que le encontraba muy aislado del resto, tristón, llorón y cansado.
Mi cabeza ha empezado a bullir.
Ayer fue el primer día en tres semanas que comió con ganas, yo le encuentro bien, de verdad, pero claro, no le veo el 100% del tiempo.
He quedado con la seño en que le observaría a lo largo de la mañana y que a la hora de comer me llamaría. No he podido esperar.
Me he ido al colegio y me he parapetado escondida detrás de la verja del recreo. Le he estado mirando durante más de tres cuartos de hora sin ser descubierta por ningún niño ni por las profes.
La verdad es que le he visto paradito. Jugaba con sus dos amigas del alma y es que, por lo que me cuenta, los niños ahora no quieren jugar con él, como falta tanto, hacen sus grupitos y no cuentan con mi sol.
Luego, cuando se han ido hacia el comedor he hablado con su seño, dice que se ha ido encontrando mejor a lo largo de la mañana y que ahora estaba bien.
Yo sé que para ella es un marrón tener que vigilar de cerca una situación tan anormal como esta, pero es que yo no puedo hacer más y lo peor de todo es que creo que haga lo que haga las cosas seguirán su curso, para bien y para mal y en este momento lo único que me apetece es sentarme en un rincón y desaparecer.

martes, 17 de noviembre de 2009

Estoy que lo tiro

Pero literal, tengo los armarios llenos de cosas que, o no me valen, después de haber recuperado los 6 kilos que tanto me costó perder, o que no me gustan, porque son de antes de la guerra mundial (de la primera). El caso es que, aprovechando que ayer y hoy los niños han ido sin novedad al cole, he estado de "walkabout". Ayer tuve loquero, a primera hoa. Por fin ha entendido lo que me pasa, no hay ninguna pastilla que vaya a conseguir lo que yo busco, que mi sol se cure ya, así que me ha dejado las mismas.
Aprovechando que está en el centro me fuí de compras. Encontré un abrigo entallado corto en Zara en color café precioso. Buscaba unos zapatos, pero no encontré nada especial, así que lo dejé.
Hoy he estado de mercadillo, me encanta. Os dejo una foto malísima de mis adquisiciones. He encontrado un bolso tipo Kelly de color malva, divino, super bien rematado, vamos, que da el pego que no veas y luego un hule de pollitos y gallinas, para sustituir el de la cocina que estaba todo pintado. Como era el que más me gustaba he repetido el modelo anterior.
Mañana no saldré más que a por el pan, luego seguiré con el arreglo de armarios.

lunes, 16 de noviembre de 2009

Reflexiones


Anoche entré en el blog de Duna antes de acostarme. ¿Para qué lo haría?, uf, me encantó la entrada con reflexiones y me he pasado la noche dando vueltas y vueltas pensando en cada una de ellas. Voy a escribirlas a ver si de una vez dejan de rondarme en la cabeza.

Yo tengo ... amor para dar y regalar y MUCHO MIEDO.
Yo digo ... siempre lo que pienso y eso no es bueno.
Yo pierdo ... los nervios con facilidad.
Yo necesito ... a mi familia.
Yo debo ... aprender a ser más flexible conmigo misma.
Yo creo ... que algún día reencontraré la fé perdida.
Yo sé ... que nunca encontraré razones para cada cosa que me pasa.
yo lloro ... demasiado, no me aporta nada bueno.
Yo canto ... fatal y a todas horas.
Yo río ... cuando mis duendes ríen.
Yo miento ... a todos cuando digo que estoy estupendamente.
Yo vivo ... por y para mi familia.
Yo bebo ... generalmente agua y de vez en cuando, margaritas.
Yo pienso ... demasiado y luego me duele la cabeza.
Yo escucho ... a los demás y siempre que puedo, el rumor de las olas del mar.
Yo como ... mogollón, dulce salado y a todas horas.
Yo disfruto ... viendo a los míos disfrutar.
Yo aprendo ... que siempre se puede aguantar un poquito más.
Yo olvido ... pocas cosas, aunque algunas haga grandes esfuerzos para borrarlas de mi mente.
Yo hablo ... por los codos.
Yo compro ... ahora, cosas para mis duendes, antes zapatos, zapatos y más zapatos.
Yo veo ... un mundo injusto que no me gusta.
Yo quiero ... saber que hago todo lo que puedo.
Yo siento ... que nací para ser madre.
Yo soy ... pues ni lo sé, la verdad.

jueves, 12 de noviembre de 2009

Cocinear (no confundir con cocinar)



En casa cocineamos mucho. Nos gusta disfrutar la cocina. Quizás sea porque a mí me gusta perder el tiempo entre perolas mientras las nubes de mis pensamientos se escapan por la campana extractora.
Tenemos la suerte de contar con una cocina generosa en la que destaca sobre todo el desorden.


Encima de la mesa de comer, una de IKEA enorme, cabe de todo menos lo que debería. Suele haber plastilina pegada en el hule, coches debajo de las sillas, periódicos viejos recortados encima de la encimera y ya, lo último que nos faltaba era la Wii conectada a la tele pequeña. La Wii es de quita y pon, no forma parte del paisaje fijo.


El fin de semana pasado fue malo, por decirlo de manera optimista, y cocineamos mucho. Mientras yo me perdía entre fogones, mis duendes mayores le daban a la Wii y mi contrario leía, mi garbancito observaba atentamente a sus hermanos mayores intentando descubrir el encanto a un cacharro al que yo no dedicaría si un segundo.

Así, fueron pasando las horas, los minutos, los malos ratos y llegó el martes. Este es el reloj de mi cocina, si os fijais hay cun globo terráqueo y un barco de vela pegado al segundero que recorre el mundo entero en un minuto. Es toda una obra de arte, regalo de mi cuñada hace 10 años y que me gusta un montón.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Contra el viento


Dejé a Lisbeth Salander aún recuperándose en el hospital y a Mikael Blomkvist intentando reorganizar Millenium sin Erika Berger y encontré a la niña Säo.

Desde que le dieron el premio Planeta y leí por encima de qué iba la historia sabía que tenía que leerlo. Ya.
Podría leerse de una sentada sin tener niños revoloteando alrededor, a mí me ha durado algo más, 4 días en los que ansiaba tener siquiera un segundo para abrir sus páginas y caminar de la mano de Säo.

Supongo que Säo existe, lo que sé seguro es que hay muchas, muchísimas Säo en el mundo, en las que apenas si reparamos pero de las que podríamos aprender cada día.
Yo intento no perderme ni una sola de las lecciones de las Säo que me rodean y nunca dejaré de admirarlas, ya lo hacía desde antes de leer este libro y ahora más.

A poco tiempo que tengais os lo recomiendo: "Contra el viento" de Angeles Caso, premio Planeta 2009.

martes, 10 de noviembre de 2009

¡Será hija de puta!

Hoy se cumplen once meses del aspirado medular que confirmó la leucemia de mi hijo. Hace once meses y un día que tuve que salir disparada del trabajo para ir al hospital corriendo.
¡Once meses!
¡Y la muy zorra me llama hoy! y me dice como si tal cosa que si necesito algo que no dude en pedírselo.
Pues lo que necesito es que le salgan almorranas, pero muchas muchas y que además se caiga por unas escaleras, que no le pase nada grave, sólo que se parta las dos piernas y tenga que estar sentada sobre sus almorranas un mes entero.
¡Guarra, pedorra!

Ale, ya me he quedao a gusto.

Por cierto, la puta, zorra, guarra y pedorra no es otra que mi jefa, por si no lo habíais adivinado.

Antes acertaría la combinación de la primitiva

que el resultado de las analíticas de mi hijo.

Hoy hemos ido al hospi, tocaba, era lo pautado. El fin de semana ha sido un infierno, grita y llora, debe tener las mismas pupas que le han salido de nuevo en la boca en todo el aparato digestivo y el ano.
Pero lo que decía, hoy era día de hospi. Se ha levantado bien, comparativamente hablando claro. Ha perdido un kilo en un par de semanas, eso ya de por sí no me gusta un pelo. Pero tiene la tripa menos dura, y mejor aspecto en general.
Los resultados de la analítica han tardado en salir lo de siempre, casi dos horas y eran PERFECTOS, todo exactamente donde debe estar, leucocitos 3.100, neutrófilos el 55%, linfocitos el 25%, la hemoglobina en 11,7, y 400 mil plaquetas. Las transaminasas también han bajado respecto al viernes.
No entiendo nada. Él sigue malo de la tripa, a la vuelta del hospi se ha vuelto a hacer caca encima en su afan de aguantar y aguantar.
Y yo me metería en la cama y no saldría en un siglo.

El periódico


Ayer, por fin, asomamos la nariz fuera de casa por un rato. Mi sol se levantó algo mejor y decidimos salir a que nos diera el aire. Al volver, la conversación con mi contrario fue esta:
"- Vaya, ya que hemos salido podríamos haber comprado el periódico.
- ¿Para qué?
- Pues para leerlo
- A mí la única noticia que me interesa es que mi sol está curado y esa no va a salir en ningún periódico."

domingo, 8 de noviembre de 2009

Sigue sin salir el sol

El miedo me paraliza. Ya no puedo prescindir de los ansiolíticos, aunque intento tomar sólo uno al día, por la mañana, para no hacerlo coincidir con el antidepresivo de la noche.
Mi rubio amor no se encuentra bien, sigue con el dolor en la tripa, que tiene llena de gases y cacas retenidas. Y con el dolor en el culete que le hace gritar. Además ahora han vuelto a salirle heridas por todo el paladar, cerca de las encías, como las que tuvo en diciembre. Hoy he llamado dos veces al hospital, pero en realidad me dicen que si el viernes estaba todo dentro de un orden, la cosa no puede ser muy mala. Yo tengo mis dudas. Me encuentro como hace un año, cuando yo veía que algo grave pasaba y nadie me hacía caso. Me faltan poco más de 36 horas para volver al hospital, a control, y no sé si aguantaré.
Mi marido está fatal. Para su desgracia tiene una fe ciega en mi intuición. Yo me aguanto como puedo las lágrimas y él disimula haciéndose el fuerte, pero no cuela.
Ahora mis duendes mayores juegan a la Wii en la cocina, como si nada pasase y yo siento que el aire se me acaba y que el maldito enemigo de nombre feo me aprieta con fuerza el cuello.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Nubarrones negros


Es difícil sentirse peor de lo que yo me siento ahora, oyendo a mi hijo gritar de dolor. Le duele el culete, no quiere hacer caca, debe tener alguna fisura, aunque no se vea y aguanta y aguanta a gritos.
Llevaba toda la semana viéndole mal, quejándose de dolor de tripa, del culete, a ratos más blanco y mi cabeza empieza a elucubrar y no para. El miércoles le dejé en casa por la mañana, cuando se levantó se quejaba mucho de la tripa, lo achaqué a las mil mierdas de quimioterapia que le tocaron la noche anterior. Luego mejoró. El jueves fue al cole, pero empezó ya a quejarse del culete.
Hoy no quería ir al cole, pero le he mandado. He llamado a la oncóloga. Ella tampoco tiene una varita mágica, por teléfono no puede decirme gran cosa. Me dijo que no creía que pudiera ser una recaída de su leucemia, pero que no me lo podía asegurar.
Le he recogido del cole y he volado al hospital. Su analítica está bien, razonable, la leucemia aparentemente sigue en remisión. Le han hecho una placa de la tripa. Tiene muchos gases y cacas. Le han puesto un enema, pero ni por esas. Aguanta y aguanta para no hacer caca, algo tiene que le duele. Pero sigue gritando de dolor.
Y yo me quiero morir, hoy ya he tirado de ansiolíticos, total para nada. No diré que ya no puedo más, porque pueda o no tendré que tirar para adelante.
Tengo una cerveza en la mano. Odio la cerveza.

lunes, 2 de noviembre de 2009

Miedo inagotable

Todos mis duendes han ido hoy al colegio y yo estoy pegada al teléfono esperando que, de un momento a otro me llamen y me digan que no se encuentran bien.
Por supuesto el que más me preocupa es mi rubio amor. Le veo flojito después de esta gastroenteritis rara que tiene, o ha tenido.
Está bien, contento, juega, salta, corre. Pero llega la hora de comer y empieza lo malo, no come, dice que le duele la tripa, tiene ruidos, y no sé qué hacer. Me muero de pánico y no quiero pensar, pero es tan difícil.

Costumbres de otros lados.


Marcos llegó a España hace unos quince años, con veintipocos. No tenía formación específica en nada pero sí muchas ganas de aprender y de trabajar. En eso estaba, buscando trabajo cuando encontró a mi suegro, que buscaba a alguien espabilado y por suerte se encontraron.
Aprendió castellano hablando con él, así que usa sus mismos giros y expresiones. Vale un nontón, en casa todos le queremos.
La relación entre ellos dos era perfecta, se entendían casi sin hablar, cuando mi suegro se fue, él quedó mucy afectado. Dice que se acuerda de él a cada paso, que le ayudó mucho y que siempre le estará agradecido.
Este año, como cada verano fue a su país, a Polonia y entonces lo trajo. Allí es costumbre encender una especie de lamparilla el día de los difuntos para recordar a aquellos que se fueron. Le trajo una lamparilla a mi contrario y le pidió que por favor la encendiera.
Así lo hemos hecho una vela para el día 1 y otra para hoy, que lucirán hasta agotarse, tal y como él quiere.
Nosotros, con o sin lamparilla le añoramos igual.

Fiesta de cumpleaños

Después de una semana difícil todos nos merecíamos una fiesta, pero los que más, los cumpleañeros, mi hada y mi garbanzo.
El viernes por la noche me acosté casi a las dos de la mañaña, estuve inflando globos para hacer flores y ponerlas por todos lados, mirad que bonitas quedaron.

Los puse por todos lados, en el salón, en la escalera, en la puerta de la calle. Cuando mi hada se levantó el sábado y los vio, le encantaron.
Ni que decir tiene que el sábado fue un corre-corre completo. Había que apartar todos los muebles del salón para hacer sitio. Saqué mis cinco mesas LACK de Ikea que tengo para estos menesteres, até las patas e hice una mesa larga para todos los niños. Pusimos un precioso mantel y luego mis duendes fueron repartiendo los platos, vasos y servilletas de Mickey Mouse.
Dejé la mesa grande del comedor como "auxiliar y camarera", allí estaba la bebida, platos y cubiertos de repuesto, en fin, cosas que hacen falta para una fiesta.
A media mañana mi hada se puso a llorar enfadada, ella quería que su fiesta fuera de disfraces y yo les había dicho a todas las mamás que no, que era un cumpleaños normal. Pues nada, como la que mandaba era ella tuve que llamar a todas las mamás y avisarlas del cambio.
A partir de las cuatro de la tarde nos pusimos a hacer sandwiches y mediasnoches como locos, de todo un poco, Nocilla, jamón y queso, chorizo, salchichón. Sacamos las patatas y los gusanitos, aceitunas, vamos un arsenal completo de cosas.
Mi garbancito no quiso disfrazarse, a pesar de ver a sus hermanos con sus túnicas de bruj@.
Los niños empezarn a llegar y por un momento me dio por pensar que más que una fiesta de cumpleaños aquello iba a parecer un akelarre, madre mía, todos venían disfrazados de brujos. Menos mal que luego llegaron Blancanieves, Cenicienta, Dark Bader, el Capitán Garfio y un hada y la cosa mejoró.


Había contratado un mago para entretenerlos durante una hora y fue fenomenal. Ellos disfrutaron un montón y de paso estuvieron tranquilitos sin desparramar tarta por el suelo.
Cuando ya se fue llegó el momento de las puiñatas, una de Cenicienta y otra de Mickey, ni os imaginais el follón, todos por el suelo cogiendo caramelos y chorradas, se fueron cun unos bolsones que para qué contar.
Este año los papás fueron bastante obedientes en cuanto a la hora, a eso de las 8:30 todos se habían ido ya. Entonces llegó el momento del zafarrancho. Mientras los abuelos sacaban lustre a los niños en la bañera, mi contrario y yo le dábamos a la aspiradora y a la fregona. Cuando los niños se durmieron y nos dejamos caer en el sofá nos dolían hasta las pestañas, pero estábamos contentos, todo había salido genial.

Además, aunque mis duendes no lo sepan, han tenido una invitada especial en su fiesta, Pepa, su abuela viejita, me explicaré.
El viernes por la noche para atar los globos unos a otros para formar las flores, busqué una cuerda, lana o similar. Apareció un pequeño ovillo de lana azul de un jersey que me había hecho mi Pepa hace 20 años.
Así fue como, atando y atando la lana se fue terminando y al usar el último trozo apareció..., mi Pepa había errollado la lana alrededor de un papel en el que estaba escrito su nombre, entonces supe que ella también vendría.