Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

jueves, 29 de abril de 2010

¿Se acaba la guerra civil?


Si alguien tiene la curiosidad puede verificar que la primera entrada a este blog lleva esa frase por título, aunque sin los signos de interrogación.

Querido abuelo:
No lo entiendo, no me gusta y lo peor es que tú no estás aquí para ayudarme. ¿Qué está pasando, qué nos está pasando para volver de esta manera a las dos Españas?. No lo sé.

No es que yo esté a favor del borrón y cuenta nueva, no es eso, es que empeñarnos en el pasado es un error que no puede llevarnos a nada bueno.
Por un lado los tuyos y los treinta y cinco años de recordar día a día lo que perdieron y por otro lado los contrarios, los que se supone que ganaron, pero que también dejaron muchos muertos en las cunetas.
Si la guerra te hizo duro, la posguerra y la dictadura terminaron de rematar tu carácter, siempre desconfiado, siempre a la defensiva, pero piensa, al menos ninguno de tus familiares directos fue asesinado a sangre fría.
Piensa ahora en mi Pepa, tu consuegra, de la que eras tan diferente en ideas como afín en carácter. Piensa en su padre, nacional, al que sacaron de su casa y nunca volvió, al que asesinaron y enterraron en una fosa común en las tapias del cementerio de Carabanchel. ¿No merecería él tener una tumba a su nombre?, claro que sí, como se lo merecen todos y cada uno de los que cayeron, fueran del bando que fueran.
No entiendo la crispación de estos tiempos, este volver a remover y remover lo que había quedado atrás.
¡Desmantelar el Valle de los Caídos!, uf, mira que no he ido nunca ni tengo intención de ir, y la idea no me parece descabellada del todo, lo que me parece es que la economía de este país no está ahora para gastos innecesarios. ¿No sería mejor subsidiar a las empresas para crear más puestos de trabajo que desmantelar pedruscos?. No me puedo creer que hasta el más resentido de los supervivientes de la guerra no esté de acuerdo en que el dinero que puede emplearse para desenterrar a sus muertos no se emplee en su lugar para mejorar las condiciones laborales de sus nietos. El ley de vida, los que se fueron no van a volver y los que estamos necesitamos salir adelante y las cuentas públicas no están para tirar cohetes.

Querido abuelo, ¿dónde ha quedado el sentido común?, te quiero como siempre y te extraño como nunca.

1 comentario:

Lamardestrellas dijo...

No puedo estar más de acuerdo, Lou. No está mal mirar atrás y aprender de los errores pero siempre para tomar carrerilla y seguir avanzando. Y hay veces en que me da la impresión de que caminamos hacia atrás y mirando siempre al de al lado como si fuera el enemigo. Sea del bando que sea.