Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

lunes, 13 de julio de 2009

Un loro


Querida Pepa:

Ya sabes que estuvimos en Tenerife estos días atrás, no te puedes imaginar lo que pensé en tí, un poco por todo.
Ya en el vuelo de ida coincidimos con una "sor" de la misma congregación de Presen, seguro que la conoció, porque tenía bastantes años. Luego ya allí, recordé tus viajes, cuando ibas a acompañarla de vuelta al convento y aprovechabas unos diítas para descansar.
No se si fue allí de donde salió tu pasión por los loros. En realidad siempre tuviste mucha afición por los pájaros (chica, de las pocas cosas que nunca podría compartir contigo). Pero tú lo que querías era un loro, uno bien grande que chillase y armase ruido.
Al final nunca lo tuviste. Bueno, no lo tuviste de verdad, pero no sé quien te regaló un enorme imán para la nevera con un loro rojo y verde que luce hoy en la mía y que cuido como oro en paño.
En el hotel, uno de los días uno un espectáculo de loros. Tenías que haber visto la cara de los niños, qué ilusión, qué contentos y qué sorprendidos, bueno, seguro que los viste.
En fin Pepa, que te quiero, como siempre, y te echo de menos como nunca.

2 comentarios:

Lamardestrellas dijo...

Siempre que leo estas entradas me da por pensar que ya no soy nieta... ¿dónde estarán?

Lou Perea dijo...

En las estrellas Lamar, en las estrellas.
Besos