Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

domingo, 13 de abril de 2008

El fondo y la forma

Soy una maleducada, lo digo, alto y claro, sin adornos, MALEDUCADA.
¿A que se entiende mucho mejor así que si digo que "tengo una educación de dudoso gusto que me haría no quedar bien en determinadas circunstancias de la vida diaria"?. Pues en eso consiste mi mala educación, en decir las cosas con claridad y sin florituras. Eso no quiere decir que al primer feo que vea por la calle me le encare y le llame feo a la cara, pero no hago más que dar vueltas..., tengo que explicarme.
Otra vez he vuelto a discutir con mi contrario, nada nuevo, es uno de los deportes que más practico, el asunto es que se enfada porque dice que siempre soy una quisquillosa y tiquismiquis con todo y que a cada paso le voy reprendiendo. Quizás es así, yo no lo hago con mala intención pero lo cierto es que me gustaría no hacerlo.
Si le tengo que decir a cada momento lo que me gustaría que hiciera, la primera vez se lo digo más "adornado", la segunda un poco menos y a la tercera se lo digo y punto, y ahí empieza el problema, porque "las cosas pueden decirse de muchas maneras".
Yo soy refranera y lo cierto es que hechos son amores y no buenas razones. Yo prefiero que piense en lo que me gustaría que hiciera, que que me diga siete veces que me quiere mucho, el amor empieza por no crispar los nervios del otro..., que tengo poco aguante, quizás, es cuestión de opiniones, yo creo que no.
Vale, vale, vale, dejo de gruñir, seguiré esforzándome en intentar hacer la vida de todos más agradable, a la espera de que alguien se acuerde de hacer lo mismo conmigo.

2 comentarios:

Lamardestrellas dijo...

Je, te comprendo pero a medias, porque yo tengo a mi lado un contrario que se pasa el día diciendo cómo tendría que hacer las cosas... Y sí, Lou,cansa un montón hacer las cosas como quieren los demás, en vez de hacerlo como te da la real gana. Lo que más me fastidia es que salen mejor cuando las hago a "su" manera. ;-) Besitos.

Anónimo dijo...

ERES GENIAL Y YA ESTÁ.