Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

lunes, 2 de noviembre de 2009

Costumbres de otros lados.


Marcos llegó a España hace unos quince años, con veintipocos. No tenía formación específica en nada pero sí muchas ganas de aprender y de trabajar. En eso estaba, buscando trabajo cuando encontró a mi suegro, que buscaba a alguien espabilado y por suerte se encontraron.
Aprendió castellano hablando con él, así que usa sus mismos giros y expresiones. Vale un nontón, en casa todos le queremos.
La relación entre ellos dos era perfecta, se entendían casi sin hablar, cuando mi suegro se fue, él quedó mucy afectado. Dice que se acuerda de él a cada paso, que le ayudó mucho y que siempre le estará agradecido.
Este año, como cada verano fue a su país, a Polonia y entonces lo trajo. Allí es costumbre encender una especie de lamparilla el día de los difuntos para recordar a aquellos que se fueron. Le trajo una lamparilla a mi contrario y le pidió que por favor la encendiera.
Así lo hemos hecho una vela para el día 1 y otra para hoy, que lucirán hasta agotarse, tal y como él quiere.
Nosotros, con o sin lamparilla le añoramos igual.

1 comentario:

Lamardestrellas dijo...

En realidad, no son tanto de otros lados... Mi madre me cuenta que, en tiempos de mi abuela, encendía una candela toda la noche, en la puerta de la casa, para velar a los muertos...