Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

lunes, 21 de septiembre de 2009

Tooooodo solucionado

Ya está, fin de mis problemas. Desde el viernes vuelvo a ser pastillera. Ya están aquí todos los magníficos efectos secundarios de las pastillitas, unas nauseas asquerosas y un bostezar todo el día sin poder parar que creo que se me va a desencajar la mandíbula. Ahora ya sólo falta todo lo demás, que todo vaya sobre ruedas y que empiece a ver la vida de color rosa, cosa que veo difícil y más ahora que no sé que le pasa s mi garbancito que tiene febrícula y pasa de la comida. Bueno, de la comida en general pasa desde los 6 meses pero es que ya ahora directamente es que le alimenta el aire.
No pasa nada, tres pastillitas más y me dará exactamente igual, ¡qué guay es ser pastillera!
A la mierda, todo a la mierda.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Bueno, y tambiémn soy pastillera. He estado tratada con antidepresivos -tryptizoles a mansalva y alguna bazofia más, y ver la vida, no la veía muy bien, porque me quedé dormida en un tren que iba a las Rozas y aparecí en El Escorial.

Aquella etapa pasó,pero no la podía haber afrontado de otra manera. Si garban no come es un horror, pero cariño, está estupendo de la muerte, grande, guapo y sano...y esa febrícula de momento no es nada más. Imagino la angustia, por lo que pueda tener y contagiar, pero intenta capear los días con ayuda de las píldoras mágicas y un poco de azúcar.

¡¡ánimo!!! Que saldrás de esta y todo volverá a su cauce, ahora es momento de pastillitas y vino tinto!!!
Id preparando un día para comienzos de octubre. café, vodaka, o frapuccinp de starbucks..vale cualquier cosa con tal de vernos.

Lamardestrellas dijo...

Ay, M., perdona pero me ha dado la risa imaginándote en ese tren de El Escorial :)
Lou, si te sirve de algún consuelo, este verano mis dos pequeños no han abierto la boca si no era para gritar o llorar, de comida, nada de nada. Y ha sido toooodo un mes así. También te confieso que aún no me he atrevido a medir y pesar a Mar...
Con pastillas o sin ellas, aunque sea bostezando o cabeceando sobre nuestro café-vino, allí te queremos, a principios de octubre. Un beso enorme para las dos.