Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

viernes, 13 de marzo de 2009

Haciéndome mala sangre

El martes tuvimos revisión y al entrar el despacho de la oncóloga la ví, fue como una patada en la boca del estómago. La miré y remiré pero callé, intentado asegurarme.
Llevo desde el martes dándole vueltas en la cabeza y haciéndome mala sangre con el tema.
Hoy ha tocado revisión de nuevo y hay que pasar por admisión, como siempre. Allí le he preguntado a S, la encantadora chica que nos atiende día sí día no, si había manera de saber el nombre de la doctora que atendió a mi hijo el 9 de Diciembre, el día que entramos por urgencias. Lo ha buscado: G.O. Mis sospechas se han confirmado, era ella, ella, la que no me había escuchado, la que había pasado de las petequias de mi hijo, ella era la que estaba con la oncólga el otro día.
Hemos subido al control de enfermería, a hacer la analítica y allí estaba ella de nuevo con la oncóloga. Le he dicho a la doctora de mi hijo que quería hablar con ella, pero a solas.
Le he dicho que no quería que la otra se acercara a mi sol, que no quería que le tocase, ni que le mirase, y le he explicado el por qué. Dice que lo entiende, pero que no tiene duda de que es buena profesional. No opino sobre su profesionalidad, opino sobre su saber hacer. Lo primero que hay que tener para ser un buen médico es saber escuchar lo que un paciente te dice, vale que la leucemia de mi sol se cazó al vuelo, pero se cazó gracias a que la doctora que relevó a esta supo escucharme y ver esas petequias de las que la otra pasó y que le pidió un análisis.
La oncóloga me ha dicho que esta está sólo haciendo una rotación por planta, pero que en ningún caso tratará directamente a mi hijo, así lo espero o la sacaré los ojos.

3 comentarios:

Emilita dijo...

mala sangre no! ´Si todos ante un mal diagnóstico médico, ante la desidia y ante la falta de humanidad de vez en cuando les plantásemos cara, mejoraría la profsión. Pero una vez hecho lo crrecto con esa médico no lo pienses más, intenta sólamente apartarla de tí y de tu sol, y sobre tod de tus pensamientos.

NGema dijo...

Pues mira totalmente de acuerdo con Em si todos protestasemos, sobre "estas y otras cosas" por llamarlas de otra forma, pasarían menos, un besote a tu sol y que todo siga mejorando como hasta ahora.

Cariños.

Lamardestrellas dijo...

Al menos se mantendrá alejada de vosotros, que es lo que más te interesa...