Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

viernes, 21 de septiembre de 2012

¿Es que yo no tengo derecho a aburrirme?

Es que mi vida es una sorpresa continua, y a mí me gustan poco las sorpresa, yo en mi cuadrícula soy feliz, pues no ea, sorpresa tras sorpresa.
Mi Sol ya no cojea, al subir o bajar escaleras aún le molestan levemente los gemelos, pero no parece que vaya peor.
He empezado la mañana atropellada, se me han pegado las sábanas y por si eso fuese poco, Garbanzo me ha llamado porque ¡oh, su cama estaba mojada!.
He salido tarde y me he encontrado con que la huelga de transporte público ha animado a todo el mundo a sacar el coche, hay mucho "tranquilo" al volante y yo siempre voy con prisa.
La jornada en linea con las anteriores, sin más, luego comida con otras mamás de amigos de mis hijos para inaugurar el curso escolar.
Luego ha empezado la fiesta.
Cuando he recogido a Garbanzo salía llorando porque se ha caído y tenía pupa en la rodilla, nada, aupa, en brazos de mamá a recoger a los hermanos. Y me veo a mi hada ¡con el tobillo derecho vendado! y una nota de la enfermería del cole para que la viera un traumatólogo. A la mierda mi plan de viernes de ir a clase de golf con los duendes.
Llamo al santo padre, al mío, para que me eche una mano, un día me la va a echar de verdad pero va a ser al cuello. Le pido que lleve a Garbanzo y  Sol a su clase mientras mi Hada y yo vamos a urgencias. Mi Garbanzo se rebela y decide que la pupa le duele mucho y que no va.
Al final en el hospi el traumatólogo casi no podía aguantar la risa, tiene una distensión, sí un levísimo esguince que no le requiere ni de reposo siquiera, con no hacer deporte en 10 días basta. He corrido del hospi a casa, he soltado a mi teatrera favorita y he volado a por mi Sol, porque mi padre le ha llevado pero tenía cita médica a las 7.
Así que ahora estoy en casa, pegándome con ellos para que se vayan a duchar y he decidido que esta noche salgo, fiesta loca, borrachera general, o lo que sea, pero que me escapo de casa, fijo.
¡¡Quiero aburrirme!!

4 comentarios:

missi dijo...

Chin chin con gin tonic!!!!

Duna dijo...

Imagino que con 3 duendecillos es imposible aburrirse, cuando vuelen del nido les echarás de menos y tendrás muchísimo tiempo para aburrirte. Un besote fuerte super mamá!

Mi Álter Ego dijo...

Jajaja. Qué tremendo la de cosas que te pasan. Espero que no tengas mucha resaca post-aburrimiento... Besotes!!!

Irene dijo...

Ja,ja... me he visto totalmente reflejada en tu entrada... una tarde asi es exactamente mi vida, con traumatologo incluido, que llevamos varias escayolas....
Será por tener tres tambien???