Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

domingo, 22 de junio de 2008

Se llamaba D



Recuerde el alma dormida,
avive el seso y despierte
contemplando
cómo se pasa la vida,
cómo se viene la muerte
tan callando,
cuán presto se va el placer,
cómo, después de acordado,
da dolor;
cómo, a nuestro parecer,
cualquiera tiempo pasado
fue mejor.

Estas palabras de Jorge Manrique expresan sin duda lo que me gustaría decir.

Se llamaba D---- y tenía 34 años, hoy le han enterrado, a las 2 de la tarde. Era el marido de una, cómo decir, amiga?, no, conocida?, tampoco. P--- y yo compartíamos conciertos a los 17 y 18, ibamos a la piscina, pero nuestras vidas no se cruzaron más allá.
Se casaron hace 6 años y desde entonces quisieron tener niños. Nunca contaron nada, pero es evidente que tienen problemas para tenerlos.
El caso es que D---- tuvo un accidente estúpido el viernes, haciendo una chapuza en casa de un amigo y se mató.
Quiero ponerme en el lugar de ella y no puedo, no puedo o realmente no quiero, no quiero saber qué se siente al quedarse viuda a los 35, sin hijos, con toda una vida por delante y con el corazón vacío.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Lo siento, Lou. Lo siento en el alma. Estas cosas no deberían ocurrir. un fuerte abrazo.