Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

jueves, 30 de enero de 2025

Baches y asfaltados

 No tengo palabra, pero tampoco fuerzas, no tengo excusas y lo peor es que tampoco las busco.

Feliz año nuevo, poco importa si mañana acaba ya el mes de enero, ¿quien me roba los días?...

Ha llovido mucho, en el sentido literal y en el figurado desde mi última entrada y sinceramente, me han faltado fuerzas para pasar por aquí. Tengo que empezar por el principio, eso es.

A primeros de noviembre me llegó un aviso a mi móvil con el título "revisión oncología pediátrica". La cita era para el viernes 8 de noviembre. Me pareció pronto, siempre hacemos la revisión de mi Sol en diciembre, pero le pregunté si podía ir al hospital ese día y me dio que sí. Vamos a obviar que me equivoqué y que el aviso era sólo para fijar una cita telefónica y darme la fecha definitiva. El caso es que finalmente la revisión se hizo ese día. Y mi Sol como una rosa..., hasta esa tarde. 

Fiebre alta, sin foco, sin nada. Intento ser racional, os lo juro, vigilamos y ya. Febrícula el sábado, febrícula el domingo, lunes no, el martes viene del entrenamiento con fiebre y con mal estado general. De la analítica del viernes se podía intuir algún tipo de virus respiratorio, pero él no tenía nada. Visita a urgencias, analíticas, placas de torax, ecografías..., nada, sólo vigilar. Miércoles febrícula, jueves bien, viernes febrícula, y sábado 39 de fiebre. Vuelta a urgencias, cultivos, más placas de tórax, más ecografías y tres analíticas a lo largo de 4 horas. No saben... No parece nada "de lo suyo", pero todas las enzimas y valores hepáticos estaban mal.

Le dan el alta y me remiten urgente a medicina interna y más ecografías por sospecha de mononucleosis. El jueves siguiente empezó con la garganta fatal y, aunque la analítica no estaba completa, la médico de medicina interna me dijo que era mononucleosis. Quedó en llamar al laboratorio y confirmarme. Ahí empezó lo malo, porque en realidad hasta ese momento, salvo por la fiebre él se encontraba bien. La cosa cambió, no había manera de controlar la fiebre. Fuimos a hacer una ecografía y se mareó, entre una enfermera y yo no podíamos sostenerle, estuvimos tres horas en la clínica hasta que se recuperó un poco. La médico de medicina interna me llamó para confirmar el diagnóstico. Descanso absoluto hasta que la fiebre remitiese y NADA de deporte, de ninguna clase, ni siquiera bicicleta estática. Eso fue lo que peor llevó. 

Poco a poco empezó a remontar, más analíticas, más ecografías, todo va mejor. Aun nos queda una analítica este martes próximo pero ya pudo empezar a moverse desde Reyes.

Y yo no razono, se me olvida comer, se me olvida hasta respirar. Tenía un viaje súper chulo a Bilbao que por supuesto no hice, no se si fue de cargar con él tuve (tengo) una tendinitis que me impide mover el hombro izquierdo, me infiltraron de urgencia y me olvidé del tema hasta que él empezó a hacer vida normal, ahora estoy rehabilitando.

Él se enfada, me ve preocupada y piensa que "aquello" de lo que él ni se acuerda le está condicionando y quiera o no, le va a condicionar de por vida.

Hay veces que sinceramente no puedo más, el terror me paraliza, no me deja pensar. Pero vamos mejor, él está bien y eso ya es bastante.

Por cierto, en mi revisión de ginecología (que da para otra entrada), en la analítica pedí que me sacaran la información de la mononucleosis y, efectivamente, la he pasado, nunca voy a saber exactamente cuando, pero si me preguntan a mi, lo tengo claro, entre febrero y marzo del año 2000, de vuelta de un viaje de trabajo a Paraguay. Ya da igual.

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