Y eso se nota.
Dejando a un lado las canas, que molestan y de qué manera, las arrugas, que van apareciendo sin que me de cuenta, empiezan a aparecer los achaques más serios.
Mi "periferia" no anda bien. Por periferia entiendo extremidades y cualquier otro elemento que sobresalga de lo que es la caja torácica, vamos, la cabeza.
Que la azotea no me rige adecuadamente es algo que vengo observando desde hace tiempo, pero para eso, aparte de psicólogos, paciencia y poco más, no hay mucho que hacer.
Mis piernas son mi asignatura actual. Con los embarazos, lo que en su momento fueron arañas vasculares son hoy en día varices en toda regla que me producen calambres, dolores y picores sin parar. Conclusión: hay que quitarlas.
He ido al cirujano vascular, en realidad ya había ido en febrero, pero hoy ha sido la definitiva. Llevaba un millón de preguntas que hacerle, dudas, preocupaciones, miedos justificados o no, pero miedos al fin y al cabo.
He salido con la cabeza caliente, los pies frios y una fecha de operación fijada para la primera quincena de Octubre.
Ahora lo que tengo que pensar es ¿la preocupación por la anestesia hará que me salgan más canas?, porque si es así tengo que empezar YA a decidirme por el color del tinte...
2 comentarios:
Caray, sabía que tenías en mente una operación, pero no de un modo tan urgente... urgente es entonces quedar, antes de que desaparezcas para celebrar tu aniversario de bodas, antes de que te metas en quirófano y estés unos días de baja... ¡Menudo mes de octubre más movidito! Ahora en serio, Lou, tranquila, todo va a salir bien ¡pero si tú eres una superwoman! ¿todavía no te has enterado?
Lou, ¿qué tipo de operación es? Porque si es con Láser, no hace falta anestesia...cuéntame nena...que eso no es complicado. La semana que viene tenemos desayuno que hay que ponerse al día.
Cuidate mucho..Un beso
Publicar un comentario