Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

domingo, 31 de julio de 2022

A cuestas con mis 50

Punto primero, al que me diga que los cincuenta son los nuevos cuarenta, lo mando a la mierda ahora mismo.

Punto segundo, estoy contenta de haber cumplido 50.

Dejaré lo de mi cumpleaños para el final.

Aunque hay un par de entradas desde Navidad no os he contado toda la "miga" de mi vida desde entonces. Lo más relevante es que tuvimos que operar a mi Sol. 

Para los entendidos diré que la avería era una osteocondritis desecante del cóndilo exterior de la rodilla izquierda. Para los normales os traduzco, una de las crestas del fémur de las que conforman la rodilla estaba rota. 

Es una lesión frecuente en deportistas de deportes de contacto con intensidad alta de entrenamiento. A edades más tempranas se escayola y se deja sellar, a los diecisiete, no.

Resumiendo, lleva dos clavos permanentes en la rodilla, estuvo ocho semanas (¡8!), sin apoyar el pie y desde el 20 de marzo va a rehabilitación dos horas diarias, sin faltar un día.

Ya camina con normalidad, trota, despacito, y hace vida normal de no deportista, pero él juega al baloncesto y va a seguir jugando, así que hay que seguir trabajando esa rodilla. Eso significa que lo máximo que podremos irnos de vacaciones serán 15 días, porque no puede perder lás de 10 sesiones o perderá el derecho de rehabilitar.

Bueno, tampoco es que mi Hada lo ponga fácil. Nos fuimos a buscarla a la Chimbamba universitaria donde vive en Mayo. Su idea era empezar "lo antes posible" con el carnet de conducir. Ese "lo antes posible fue mediados de junio. Aprobó el teórico a la primera pero sigue con las clases prácticas. Se examinará en el único exámen de la DGT en Agosto, así que ella, para el día 20 tiene que estar de vuelta aquí.

Mi pobre Garbanzo va de remolque, así que, puede quedarse en la playa con su otra abuela o venirse a casa con nosotros, no sé que decidirá.

Eso en cuanto a los duendes. 

En cuanto a mí, quise empezar a trabajar en febrero y podía hacerlo.... si me daba de alta como autónoma. Yo no sabía que se puede compatibilizar el cobro del paro con la actividad autónoma durante 9 meses, no más, y el resto, si en 5 años no vuelves al paro, lo pierdes.

Como pasó todo lo de la operación de mi Sol y demás lo dejé "casi" correr. Y digo casi porque yo nooooo valgo para estarme quieta, así que estoy estudiando. Busqué una titulación oficial de gestión comercial inmobiliaria y allí que me fui. 

El sector está completamente liberalizado pero hay mucho patán inculto que no sabe de lo que habla y eso a los que beneficia es a los verdaderos profesionales. Yo quiero ser de esas últimas. Así que ahora, cada día de 9 a 3 voy a clase.

Pues así va mi vida, siempre por caminos que no imaginé, pero bien. 

También los santos padres, los míos, son motivo de preocupación. Los años no pasan en balde y se nota. A mi padre le operaron de un aneurisma de aorta y fue duro. Todo salió muy bien pero ves el precipicio delante y a mí no me gusta el barranquismo...

Y pasaron los meses y los días y esta semana cumplí 50. No, no voy a decir que me gusta esa edad, no por la edad en sí sino porque me veo caducar. No veo nada, me duele la espalda, me duelen las articulaciones, es como si en vez de un años más, de 49 a 50, me hubieran caído los 50 de golpe. No me encuentro bien. El médico dice que no tengo nada pero yo no estoy bien.

No voy a pensarlo ahora pero en septiembre tengo que proponerme hacer deporte de manera regular. He vuelto a engordar y lo llevo fatal. No es tanto el peso extra como el reparto del mismo. Se me ponen los michelines en sitios que nunca había tenido, así que la ropa, no es que no me valga, es que no me queda bien, y no se como vestirme. Me encuentro fea y eso me deja bastante mustia. Como os digo, tengo que trabajar un poquito más en mí.

Os iré contando.

Mi cumple fue tranquilo, lo celebré al día siguiente con mis padres, la otra abuela de mis hijos, la hermana de mi marido y sus tres churrumbeles, veis, muy familiar. 

Me regalaron muchas cosas, sobre todo amor que es lo que más valoro. 

Mis chicos me rgalaron unas Converse amarillas y mis padres las que yo les pedí, las All Star negras de cuero. Mi contrario me trajo un ramo precioso de 50 rosas. Me regalaron también un maravilloso bolso de piel de cocodrilo real (por favor, no me despellejéis aún) que había sido de la abuela de mi marido, es de primeros de los 60`s. Y esta camiseta que os enseño en la foto, y unas zapatillas de estar en casa y... muchas, muchas cosas.

Así que aquí sigo, un año más y que sean muchos otros y que alguno lo leáis y al menos os entretanga un rato.

Gracias por venir.