Hola

Quiero daros la bienvenida a todos los que estáis aterrizando en el Reino de la Mermelada por primera vez. Esta es una ventana abierta a través de la que podéis asomaros a lo que es mi día a día. Si llegáis aquí buscando respuestas o información sobre la leucemia infantil, que sepáis que las respuestas están en vosotros mismos, yo sólo puedo compartir las mías. Agarraos fuerte que vienen curvas.

miércoles, 29 de diciembre de 2021

Y se fue...

 No voy a hablar de este año, que sí, que también se ha ido, voy a hablar de mi Hada.

Pues sí señores, después de dos años de papeles, exámenes, traducciones y los mil y un invonvenientes que la COVID originó, mi Hada consiguió lo que se había propuesto, irse a estudiar a EE.UU.

El proceso comenzó a finales del último curso de secundaria, allí ya empezamos con todos los requisitos que piden para estudiar allí. Haciendo el bachillerato aquí, además de unas buenas calificaciones, se exige el SAT, esto es, para entendernos, la "selectividad americana". Consta de 1600 puntos, divididos por mitades iguales entre matemáticas e inglés.

En condiciones normales hay tres oportunidades de sacar una buena nota, porque te puedes presentar hasta tres veces. Son exámenes oficiales. Su primera opción era el 2 de mayo de 2020, en Madrid...

Se suspendió.

La segunda opción era en septiembre y en Madrid volvieron a suspender los exámenes. Entonces buscamos otras ciudades donde aún no los hubieran cancelado. Sevilla en octubre fue la opción, así, facilito...

La verdad es que el resultado fue bueno y decició que con tanto inconveniente no haría otro intento. 

El sistema de "aplicaciones" a las universidades americanas es complicado para alguien de fuera, y costoso. Ella quería costa este, así que algunas muy buenas opciones las descartó, simplemente por la ubicación (es su vida, ella es la que decide) y de las tres opciones que pidió, la primera era un brindis al sol, imposible, pedían 1590 puntos, su nota era excelente pero no tanto.

Le dieron las otras dos opciones y decidió entre ellas. 

Bien.

Pagos de reservas, alojamiento, planes de comida...

¿Y el visado?. A primeros de mayo nos dieron hora en la embajada para el visado para el 30 de septiembre. Ella tenía que incorporarse el 20 de agosto.

Con mucha suerte y muchos intentos conseguimos cambiarla a primeros de agosto. Visado conseguido, PCR cruzando los dedos y...

Sin posibilidad de poder acompañarla, el país, salvo visados concretos, estaba cerrado. Cargó lo que pudo, poco, en una maleta grande y otra de mano, pero allí tuvo que comprar de todo, desde conchoncillo para la cama, sábanas y toallas hasta todo lo mas básico de higiene personal.

La aventura se complicó por culpa se un huracán que le pillo en la escala y que retrasó su llegada hasta las 3 de la madrugada.

No fue fácil, ni para ella ni para nosotros, pero se instaló y empezó su nueva etapa.

¡Es feliz allí!. Cuando abrieron el país nos fuimos a visitarla por acción de gracias y la verdad es que el campus nos encantó y verla a ella tan contenta aún más.

Ahora ha venido para Navidad y está como loca, bien con sus amigos de aquí, aunque con pocas posibilidades de salir y con ganas de ver a los de allí de nuevo.

Y yo que me siento feliz por ella y con la tremenda sensación de que está empezando a volar y que volará lejos.

2 comentarios:

Zhura dijo...

Madre mía!! tiene que ser duro a la vez que bonito ver que consiguen lo que quieren.
Un beso y buena entrada de año!!!!

i dijo...

Un Urra por tu hada!!!