Mi hada de mermelada está en casa, no es que la encuentre yo muy malita, aunque sí tiene toses, mocos y dolor de tripa. Hemos decidido dejarla por hacer que se sienta comprendida, un poquito especial, ya que su hermano cuando está malito se queda, pues ella también.
El caso es que tenía que ir al súper, a por yogures y poco más. Me ha dicho que se venía conmigo.
Al pasar por el súper al lado de casa no había donde parar el coche y con lo que estaba lloviendo no era plan empaparnos, así que hemos terminado en el centro comercial más cercano.
La visita ha sido breve, porque ella está cansada, pero le he dicho que me ayudara a elegir una camiseta que hiciera juego con unas que les compré a ellos la semana pasada en H&M. Esta es de Bershka y vamos a ir la mar de conjuntados, todo un equipo de ranas.
3 comentarios:
Louuuuuuuu, me estresasssssss, jajaja, que termino de comentar una entrada y sale otra!!!!
Ay tu hadita, ¿no tendrá mamitis?
La pobre, que también tiene derecho a mimitos.
Van a ir todos guapísimos, ya veo que te gusta ir combinados como en bañador, jeje.
besos!!!
ME ENCANTAN LAS RANITASSSSSSSS!!! Me parece muy bien que hayas dejado a tu hadita en casa, yo te confieso que alguna vez que mi princesa ha estado acatarrada y yo he tenido fiesta la he dejado conmigo. Perreamos en mi cama hasta las tantas y luego nos vemos una peli y todo jejejeje. Ahhhhhh y a las 2 el Arguiñano, que le encanta de verlo jajajajaja.
Crecen tan rápido nena que merece la pena aprovechar estos momentos ;-)
Di que sí, ella se merece un día de mimos... Ay, Lou, si hace dos días era hija única, cómo pasa el tiempo...
Publicar un comentario