En 2007 esperaba mi tercer duende. Era muy al principio de mi embarazo y no sabía si sería niño o niña y a verdad tampoco me importaba, sería Juan o Carolina.
Me fui de viaje a Vietman y allí encontré cosas maravillosas de textil para bebés. Como ya os conté en esta entrada. Y allí compre este juego de sábanas.
Mi hermano se casó tres años después que yo. siempre hablaban de tener niños pero esos niños nunca llegaron. Tanto él como mi cuñada son muy reservados, así que poco a poco dejaron de hablar del tema y todos asumimos que no serían padres.
Pero la vida da mil vueltas y esta Navidad, entre los regalos que nos dejó Papá Noel estaba un sobre rosa con una foto de una ecografía. Creo que es el mejor regalo que me han hecho en la vida. Me volví loca de alegría, a estas alturas ya no lo esperaba, pero sí, ¡voy a ser tía!.
Cuando compré aquellas sábanas en Vietman y de eso va a hacer 11 años, el, o la destinataria estaban claros, pero las guardé y esperé y esperé y asumí que iban a quedar para siempre guardadas.
Ahora sé que no, que finalmente tendrán a alguien pequeño a quien arropar, con todo mi cariño.
4 comentarios:
Qué bonito!!
Muchas felicidades
¡Qué ilusión, un bebé! En todas las casas debería haber uno siempre.
Enhorabuena!! Que alegría leerte!
Que bonito me alegro ¡¡ felicidades a tu hermano
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